-¿Que tan hermosa es?- me pregunto el gran chaman atrapa sueños
Y yo seriamente le conteste.
-Has visto nacer el sol en las grandes montañas del mundo
Como si la neblina
matutina lo forjara lentamente, o alguna vez
Presenciaste ese
mismo sol, esconderse en el horizonte del mar
Mientras es devorado
por aguas cristalinas
Dejando solamente un
cielo de tonalidades durazno y violeta
Formando en las nubes
fénix de alas expandidas
Fundidas en llamas
delicadas; o mejor aun
Has visto cómo surge un arcoíris de colores brillantes
Y traspasa las fronteras celestiales de la realidad y la fantasía.-
-Así de hermosa es ella- dijo con tono de incredulidad; pero
estaba errado.
-No, es más hermosa aun, y tan delicada como el viento que
mueve los pétalos de las rosas en los campos elíseos- dije yo, conteniendo una
sonrisa de regocijo en mis labios.
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