viernes, 22 de junio de 2012

"El poeta que cambio su corazón por una estrella"


Paso hace tiempo, en un pueblo  secreto, un lugar escondido del mundo y sus demencias
Del cual no puedo decir su nombre. Se dice que ahí vivió un hombre que brillo como una estrella; pero su esplendor no duro mucho, yo no recuerdo ese día, al igual que no recuerdo el nombre de ese hombre pero todo tiene una razón.

Fue en unas de esas edades del sol, el pueblo era reconocido entre las leyendas como el lugar donde provenían las canciones, la poesía y las historias de fantasía. Un pueblo lleno de escritores apasionados, bardos y poetas. Un pueblo fantasma, escondido entre las sombras de un bosque mágico y prohibido; En él vivió un joven aprendiz de poeta, como un aprendiz de hechicero que busca nuevos conjuros, el joven poeta buscaba nuevas palabras, sentimientos y emociones que enamoraran al pueblo lleno de críticos duros y después se esparcieran en el mundo entero. Pero como todo aprendiz aun le faltaba mucho.

Cada luna llena se hacia una gran festival en el pueblo  (alrededor de cada 5 meses parecía la luna llena)*, el festival de las letras de las almas, todos aquellos escritores, bardos, poetas y la gran gama de personajes que utilizaban las historias y las palabras para comunicarse. Se reunían en un gran pabellón iluminado por fuegos fatuos, traídos de un infierno profundo por dioses olvidados. Y exponían su trabajo con fiereza, con astucia y con respeto a un público silencioso pero difícil de sorprender. Para alcanzar una victoria preciada, entregada al mejor talento que se alzase ante los demás.

Quien ganase aquel festival, tendría el honor de que su trabajo fuera reconocido y contado alrededor del globo. Cada que alguien ganaba el escrito era copiado varias veces, arreglado y protegido con sortilegios extraños para que no pudiera ser cambiado. Después eran entregados a los jinetes del alba, un grupo de 6 jinetes que llevaban historias del mundo a cada pueblo de la tierra, de una forma muy peculiar. Estos jinetes estaban hechos de sombra y oscuridad, mantos con forma humana que montaban cuervos gigantes esperando la noche mas oscura, se internaban en las habitaciones de las personas elegidas como los voceros de aquellos escritos y se las murmuraban entre sueños junto con el nombre de aquel hombre que la había creado, volviéndolo una leyenda y así al despertar esa gran historia, canción o poesía. Era contada de taberna en taberna, de casa en casa, en grandes castillos y en los callejones más mugrientos. Y nunca era  olvidado aquel gran hombre que había creado tan perfecta conjunción de palabras.

El joven aprendiz de poeta, deseaba la victoria más que nada y lo intento, una, dos, tres, cuatro veces sin conseguir mas que aplausos y consejos para que lo siguiera intentado y así lo hizo pero aun le faltaba aprender.

Cierto día el joven entro al bosque, el cual era hermoso, con arboles frondosos y altos, bellas flores de colores místicas, piedras antiguas y animales curiosos, pero ese bosque era aun mas especial pues en la profundidad de el existía un lago misterioso, del cual se decían cosas muy extrañas; sin embargo, el joven pocas veces hacia caso de la historias, esas que decían que ahí en ese lago viva una dama muy hermosa que tenia alas como de pájaros y unos ojos profundos como el cielo nocturno, con una sonrisa que encantaba cualquier mortal que la viera y después le robaba el corazón; solo hacia presencia cada vez que la luna estaba en cuarto menguante y las libélulas jugaban en la superficie de ese gran lago. Y ese día era el indicado, así esperaría la noche en la orilla del lago esperando la luna y a la dama para ver con sus ojos si la historia era cierta.

Cuando llego al lago y se sentó en la orilla, saco de su bolsa de cuero unos cuanto pergaminos y una pluma hermosa de tinta de sangre negra de dragón. Realmente era una pluma común y corriente; pero el recordaba esas palabras de la persona que se la había dado hace tanto tiempo. Una persona especial que tenía un lugar en su corazón y que un día simplemente tuvo que partir. Y empezó a escribir algunas rimas, uno que otro pensamiento, descripciones de la imagen frente a él y poco a poco el sol fue consumido por el manto nocturno y la luna de cuarto menguante. Para la sorpresa del joven miles de luciérnagas empezaron a llegar para jugar sobre la cristalina superficie del lago, pero solo eso paso. Nada de lo que hablaba la historia era verdad, aquella dama no existía, después de todo era una historia mas y tal vez ese fue su error en aquel momento.

Junto los pergaminos y su pluma para guardarlos en la bolsa de cuero, se levanto del piso y se dispuso a marcharse, pero escucho una melodía, una tonada traída en la calidez de una voz hermosa e hipnótica. Esa melodía provenía del lago o de aquella figura que bailaba sobre el lago, una mujer con una grandes alas bañada por la luz de una luna joven.

Los ojos del aprendiz se negaban a creer lo que veían.

<< ¿Cómo es posible? >> Se preguntaba, mientras frotaba sus ojos.

Aquella figura femenina se percate de la presencia del aprendiz y se acercó caminando sobre la tranquila superficie del lago hasta tocar la orilla lodosa, el joven quedo paralizado no sabia que hacer, mientras la figura se acercaba cada vez mas hasta que quedo a unos cuantos centímetros de él. El joven vio lo hermosa que era ella y sin pensar de su boca surgió una pregunta.

<< ¿Eres un ángel? >> Lo dijo con una voz entrecortada y después se sonrojo.

La dama sonrió, y su sonrisa derritió el corazón del joven haciéndolo caer de rodillas.

<< querido mio, no se si sea un ángel, pero soy la dama de este lago guardiana de los rayos que la luna resguarda en sus cristalinas aguas >> contesto la dama, con su voz hermosa que taladraba profundamente los oídos del joven.

<< ¿Estas perdido joven aprendiz de poeta? >> pregunto ella al ver que el joven no reaccionaba.

<< No… no, no lo estoy, dime ¿Cómo sabes que soy un aprendiz de poeta? >> hablo el joven saliendo de su aturdimiento.

<< Lo veo en tu corazón, lleno de pasión y fuego… y también veo que en el tienes un deseo; un deseo que yo puedo hacer realidad si me lo dices >> dijo ella con un tono extraño.

<< ¿Un deseo?... bueno si, si lo tengo. Pero no creo que puedas cumplirlo >> dijo el con tristeza en sus palabras.

<< Dímelo a mi querido, yo puedo hacer lo posible >> contesto ella.

<< No pierdo nada con decírtelo, así que, mi deseo es escribir algo hermoso, que hará que sea recordado para siempre y brillar como una estrellas >> el joven aprendiz, se sintió tonto al decirlo y agacho la cabeza; ella tomo su mentón y lo levanto para poner el rostro del joven frente a la de ella.

  << Yo puedo lograr que hagas eso, pero a cambio tienes que darme algo >> los ojos de la dama brillaron.

<< Que es lo que pides a cambio de ese deseo >> pregunto el joven un poco ansioso

<< Tu corazón >> dijo la dama sin vacilar.

<< ¿Mi corazón? Pero entonces ya no tendría uno y moriría… ¿como podría lograr hacer mi deseo realidad? >> pregunto el joven un poco asustado.

<< claro que no morirías querido mio, cambiaria tu corazón por una estrella y así podrías brillar como una y cada que quisieras escribir algo bello solo tendrías que venir a este lago y el fulgor de la estrella se reflejaría en las aguas y te inspiraría de forma mágicas escribiendo las cosas mas hermosa que el mundo nunca antes había escuchado, pero sin embargo debo decirte que como toda estrella alguna día… tu luz se apagara y te desvanecerás en la noche como una estrella fugas dando tu ultimo destello, y aunque el mundo no olvidara nunca tus poemas, olvidara el nombre del que algún día los creo, sufrirás la misma suerte que una estrella, pues cuando una de ellas se extingue su nombre se olvida para siempre en los confines del universo, ¿ aun quieres cumplir tu deseo? >> pregunto la dama con ansiedad en sus labios.

<<Mientras viva seré recordado, y cuando muera he de extinguirme como una estrella pero mis poemas nunca morirán… lo acepto >> y diciendo esto ultimo la dama abrió sus alas y subió al cielo, donde tomo una estrella y la bajo en sus manos, la estrella brillaba como un gran diamante; era cegadora pero hermosa y la puso en el pecho del joven.

<< Entonces que así sea querido mio, una estrella a cambio de tu corazón >> dicho esto la estrella entro en el pecho del joven inundándolo de calor y se acomodó en el lugar donde estaba su corazón, el cual descansaba en las manos de la dama.

<< Ahora ve y demuéstrale al mundo lo que puede hacer querido mio, ve y brilla como una estrella >> y joven poeta así lo hizo; por muchos años sus poemas recorrieron el mundo al igual que su nombre en el pueblo se había convertido en un maestro y todos lo respetaban pero como lo dijo la dama aquellas vez su luz se iba extinguiendo y eso no era el problema del asunto poco a poco se dio cuenta de una verdad que le aterro y lo hundió en una oscuridad de sus días.

Los últimos días antes de que la luz se extinguiera de su pecho y su esplendor fuera eclipsado de la muerte volvió al lago a visitar a la dama, de nuevo la espero en la orilla y cuando vio a las luciérnagas y escucho su melodía la llamo.

<< Hermosa dama del lago, hace tanto que mis ojos no se deleitan con tu hermosa figura, he venido en mis últimos días para que los reduzcas a mis ultimas horas, pues ya estoy cansado y al fin me di cuenta de la trampa >> dijo el joven, pues aun era joven no mas de 28 años. La dama se acercó y lo miro con unos ojos de compasión y le dijo: << mi joven poeta aquel día que hiciste el trato te veías tan desesperado que no creí necesario decírtelo, disculpa no haber sido sincera, pero tu corazón es algo muy preciado para mi, lo guardo en mi pecho siempre como la joya mas hermosa, que triste ha sido la verdad y lo siento y por eso voy a concedértelo esta noche apagaras tu estrella y dormirás conmigo en las profundidades de este lago donde yo nunca te olvidare >> al terminar esto, la dama extendió su mano al joven que la tomo tiernamente y junto entraron al lago donde él durmió por siempre. Esa noche la gente del mundo olvido el nombre del gran poeta pero no su poesía y esa misma noche en el pueblo todos los escritores se inspiraron al ver una hermosa estrella fugaz caer en medio del bosque.

Fin

“la verdad que descubrió el joven aprendiz es que realmente sus poemas nunca fueron suyos, y no brillaba con luz propia, todo eran creaciones de un poder mágico que se extinguía lentamente, mientras que las cosas que salen del corazón, duran para siempre y así uno logra convertirse en la luz de otros y en una estrella que brilla en la oscuridad de muchas almas, pues el poeta debe llevar luz a los ojos y a los corazones que han caído en las fauces de una bestia indomable como la soledad, y debe hacerlo con el corazón después de todo el corazón de todo ser humano siempre debe ser admirado por ser único en el universo” 

Noel A. Loaiza.

4 comentarios:

  1. Hermoso. Tu siempre me das los mejores regalos =).

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  2. Bueno alguien me hizo un pastel de brownie, eso también fue bueno :)...

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  3. hermoso!
    tu vivías ahí,
    en otra vida, en otro tiempo :)
    un beso

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  4. :3 cuando las cosas salen del corazon, estas nunca perderan su esplendor, ya que es algo hecho con carino, nada es facil, y mas si quieres que sea siempre recordado

    muuuak!!! :D me lo cuetas despues??

    :P

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